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BENDITO SEAS
Frágil
nos enseño
el silencio
a perdonar
en el murmullo
nuestras culpas,
a extender las manos
entre la niebla,
a sacudir
el fantasma de la
cordura.
Bendito seas
si naci pecador
dijo el señor
y todo se volvió
mentira,
descendieron los
arcángeles,
la culpa
escondió su rostro,
el beso
nos fue negado
se torno salobre
en la mejilla.
REYNALDO
ARMESTO OLIVA . CUBA . IWA
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